Ya pasaron varios días desde la muerte del terrorista más buscado del mundo. ¿Qué consecuencias nos trajo? ¿Qué consecuencias nos puede traer? Aqui mi perspectiva.
Dejando de lado esas creencias conspiranoicas de si está realmente muerto o no, vamos a dar por sentado que si lo está, que es lo que yo creo.
Este ataque tiene una consecuencia inmediata: aumentar la popularidad del presidente Obama, que se vio golpeado últimamente por el tema económico y por algunas derrotas electorales. Este suceso le dio al Presidente de EEUU 11 puntos más de popularidad. Es algo.
Ahora, con respecto al ataque en sí, quedan muchas dudas. Quedan dudas sobre la legalidad o no del ataque. Es cierto que Pakistán era un aliado de EEUU en la guerra contra el terrorismo, también es cierto que los estadounidenses no avisaron a los pakistaníes de esta acción. También es verdad que se llegó a ese punto gracias a los interrogatorios de Guantánamo (cárcel que Obama había prometido cerrar). Y que ante tantas versiones contradictorias, pareciera ser que Bin Laden estaba desarmado. Y el ataque a la mansión fue un verdadero baño de sangre.
Y encima de eso Pakistán ahora está en el ojo de la tormenta. A pesar de las advertencias, EEUU sigue atacándolo con bombardeos. Realmente se ve mucho pesimismo en el horizonte.
Lo importante es que, Bin Laden muerto o no, todo sigue igual. Nadie le va a devolver la vida a todos los muertos en Afganistán, Irak, etc. ni los años perdidos a todos los presos en las diferentes cárceles como Guantánamo o Abu Ghraib. Y si alguien pensaba que muerto Osama Al-Qaeda dejaría de existir, por supuesto que se equivoca. Ahora con un mártir tienen una causa más para su cruzada.
Sobre esto último dejo algunas opiniones más calificadas: un artículo de Pedro Brieger, otro del mismo autor, uno de Noam Chomsky y una reflexión de Fidel.
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